Situado en África Oriental, Kenia es uno de los países africanos que produce un café Arábica lavado de mayor calidad. Este café se caracteriza por su aroma y acidez media/alta. A pesar de que en algunas zonas de Kenya existen cafetos salvajes, las plantaciones que actualmente dan la producción importante provienen de las que se crearon por los ingleses a finales del siglo XIX y principios del XX, con el apoyo y la experiencia de los misioneros franceses del Espíritu Santo que ya habían introducido este cultivo en la vecina Tanzania.